martes, 14 de octubre de 2014

Mons. JOSÉ HERNÁN SÁNCHEZ PORRAS(+)

13.10.14 Caracas, Venezuela.

En horas de la tarde de este lunes 13 de octubre falleció Monseñor JOSÉ HERNÁN SÁNCHEZ PORRAS, Obispo DE LA CEV y Coronel del Ordinariato Militar.

José Hernán Sánchez Porras, nació en Palmira, Estado Táctica, en 1944 fue también Secretario de la Conferencia Episcopal Venezolana, CEV.

Monseñor ocupó ésa función hasta que aprobó el curso de Estado Mayor para ascender a Coronel del Ejército de la Capellanía Militar, posteriormente el Cardenal Ignacio Velasco, lo eleva a Obispo del Ordinariato Militar y pasa a cumplir ésa labor en las dependencias militares.

Sánchez Porras se graduó en Filosofía y Teología en el Seminario Mayor Santo Tomás de Aquino de San Cristóbal.

El 25 de junio de 1967 fue ordenado sacerdote en Palmira y el 28 de diciembre de 1981 es nombrado Capellán por el Papa Juan Pablo II, de acuerdo con el Ordinariato Militar de Venezuela.

Fue un hombre muy obediente a Dios, un justo y humilde sacerdote, que mostraba gran prudencia así como firmeza clara en sus decisiones.

Abierto a dar consejos únicamente a quien se lo solicitara, siempre mantuvo su posición ya que como dijo una vez: "En la Biblia está la forma de cómo proceder y así debe uno actuar."

Otro sabio consejo que me dio en una ocasión fue: "Cuando alguien ensucie y manche a la Iglesia, tome usted un cepillo de cerdas de hierro, rocie cloro, lejía y ácido muriático, restrieguela y frótela y agrégele mucha agua...arroje lo sucio fuera de ella, hasta que vuelva a quedar limpia y resplandezca de blancura. Sólo así la Iglesia recobra su santidad!"

Todos los años cumplía con la visita a los 7 Templos en Semana Santa. Yo le veía llegar y mi corazón brincaba de contento, siempre entraba rodeado de familiares, otras veces de seminaristas y últimamente de Capellanes y demás miembros del Ordinariato Militar.

Para Mons. Sánchez Porras, ir en penitencia acompañado, a presentarle sus respetos a Jesús en el Sacrificio de la Cruz, era envolverse en ésa LUZ de agradecimiento cristiano al Dios del AMOR VERDADERO. Siempre lució un rostro santo ante el SANTO de DIOS en ése día, era verle un rostro de oración de penitente, era sentirle envuelto en un aro de entrega y paz. Pasaba al Templo y sin hacer ruido ni espavientos se ponía de rodillas en las últimas bancas, para no distraer. Permanecía minutos en Oración con la cabeza gacha y las manos juntas, luego se sentaba, respiraba profundo, observaba y en silencio se retiraba no sin antes saludar a los pocos que le reconocíamos....con una amplia sonrisa, una alegría sincera por volverte a ver, un apretón de manos o una bendición.

Ése fue mi Obispo Sánchez Porras, un hombre nada común y corriente, que pasaba desapercibido, recto, respetuoso, conciso, amable, humilde pero firme, que te recibía con un cariño extremo que te acercaba a Dios. Que siempre te oía. Quiso y se esforzó porque todos asistieran a Misa diaria y comulgaran, siempre deseó que todos fueran a Dios y todos le conocieran entrando en el pensamiento del Padre Dios.

Era un gerdarme, custodio de la Palabra en la Biblia, del recto caminar y diligente en sus funciones, consejero de la vida diaria. Y no es que nunca cometió errores, o que jamás se equivocó, pero lo que le admiré es que salió de la mediocridad del común, superó sus propias fallas, para ser cada día, mas apto para el Señor de los Ejércitos, nuestro Señor Jesucristo.

Que brille para JOSÉ HERNÁN la Luz Perpetua, descanse su alma en la paz del Señor. Amén. El Dios de los Ejércitos, el Padre Eterno lo reciba en la Gloria Eterna de los soldados que defendieron con fidelidad nuestra fe!.

Duele para los que quedamos aquí, pero me repito: "No es mas que un hasta luego Monseñor Sánchez Porras...muy pronto juntos en el Cielo, nos reunirá el Señor!"
M.T.U.V.
Enviado desde mi dispositivo movil BlackBerry® de Digitel.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja tu comentario para nuestro Blog Divina Misericordia