domingo, 9 de agosto de 2015

¡LA BENDICIÓN CON AGUA BENDITA ES UN SACRAMENTAL! (2)

" EL AGUA BENDITA":
ES UN SACRAMENTAL EXORCISTICO Y PURIFICADOR

Porqué hay agua bendita a la entrada de algunas Iglesias?

Si uno se santigua con agua bendita con devoción, eso produce tres efectos:

1-Atrae la gracia divina, purifica el alma y aleja al demonio.
2-Ese gesto de santiguarse con esa agua, nos trae gracias divinas, por efecto de la oración de la Iglesia. La Iglesia ha orado sobre esa agua con el poder de la Cruz de Cristo.
El poder sacerdotal deja una influencia sobre esa agua. Al mismo tiempo purifica parte de nuestros pecados, tanto los veniales como lo que quede en nuestra alma.
3- El tercer poder del agua bendita es alejar al demonio. ¡El AGUA BENDITA, SÍ QUE LO ALEJA de VERDAD!.

Por eso se bendicen las personas las casas y objetos con un sacerdote, para dispersar las influencias del malo en tu vida, en la familia y en los hogares u objetos, especialmente donde conviven o con los instrumentos de oración y protección como lo es La Biblia, los Crucifijos, el Rosario, las imágenes, medallas.

La gente se suele quejar de distraerse mucho en la Iglesia, o cuando reza. El demonio tiene gran interés en distraernos justo cuando vamos a estar en contacto con las realidades sagradas. Por eso es tan útil el Agua Bendita en esos momentos. Si aún usando el agua bendita nos despistamos, entonces es mejor consultar a un sacerdote.

El más famoso entre los elementos materiales usados en los sacramentales es el Agua Bendita. Podemos ver la historia del agua y su significado en toda la Biblia:
Ex 14,15-22; Ex 17,6-7 ; Jos.3,14-17; Ez. 47, 1-12; Mt.3,13-17; Jn 5,1-9; Jn 19,34; Jn 3,5.

La Escritura sienta precedente sobre el uso de elementos materiales y en especial el agua [y el aceite] como "instrumentos del poder de Dios".

El Agua bendecida por un Sacerdote es un enorme regalo para el Espíritu, para la Salud Física, para el Alma.

Se ha descubierto que la energía "transforma" las moléculas de agua, cambiando hasta su aspecto, cuando se reza, se usan frases bellas, armoniosas, música angelical entonces el rostro, los ojos, asumen unas características hermosas… en cambio con palabras feas, insultos ó maldiciones, envidias, chismes, enredos, se oscurece, se afea...

Recordemos que nuestros cuerpo está principalmente formado por agua! De nosotros depende que la Energía Divina obtenida en la Misa, con la Eucaristía, con la Oración personal o Comunitaria y con el Agua Bendita u otro sacramental y sacramentos, permanezcan en nosotros y nos transforme.

¿Perseveremos pues!


(Algunos puntos de: Santos de Iglesia).
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