jueves, 5 de septiembre de 2013

LA CRUZ:

Anoche te vi moribundo en la Cruz;
mirabas tu pecho y luego a mí.

Jadeabas de angustia y yo de frenesí!
Algo querías decirme Señor,
hasta que ví,
y al fin comprendí...
al verme clavada en tu pecho entendí,
que no sólo por pecados morías, mi Dios,
sino por los excluidos de la sociedad...
TÚ desfallecías e igual, yo!

Cómo no amarte, Señor...
sí, sólo tu vida tenías y la diste por amor a nos.

Éstas personas te ajusticiaron, sólo porque eras bueno y muy superior..
La envidia y el celo los ahogó, como hacen con aquel a quien ven que es mejor.

Todo se esfuma para los que sufren, pobres y ricos tienen que llorar, unos porque nada tienen y eso es fallar...
otros porque nunca aprendieron a recibir y dar!

Pero unos pocos se suben al trono y aplastan a los otros con resquemor, se llenan de ira y mucho poder..esos que un día, te hicieron padecer.

Gracias Jesús, por aclarar mis desprecios.

Gracias por sanar mi dolor; Gracias Señor por calmar mis por qués, ya se que un día contigo estaré!
Qué importan los llantos....
si contigo viviré!

MireyaUrbinaV.
24/08/2013
Lic. Mireya Urbina

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