lunes, 4 de noviembre de 2013

LA MISERICORDIA ES PACIENCIA

Por Mireya Urbina
-Seamos pacientes en este tiempo de misericordia

Hace unos días, el Papa hablo sobre la paciencia
Dios nunca se adelanta y nunca se atrasa

Puede parecernos que la misericordia es lenta, que se tarda mucho, que no llega según nuestro tiempo u horario.

La Misericordia tarda pero es segura. El Señor en su sabiduría infinita retarda el día de la misericordia porque quiere que muchos se salven. Es un tiempo sabio.

El tiempo de Dios no es igual al nuestro, por algo será y nosotros todo lo queremos para ya!

El Señor va poco a poco, buscando nuestra conversión, disculpando, dando luces, esperando, pero al mismo tiempo, suma a los resagados.

Esto no quiere decir que se atrasa tampoco que se adelanta. Simplemente se toma su tiempo, tiene todo calculado.

Claro Él es Dios, todo lo sabe. El Señor guardará sus señalamientos.... a la espera de los que tienen que ir a Él, simplemente tiene paciencia de nuestras miserias.. Aguardando por nuestro arrepentimiento, por nuestra solicitud de perdón.

"El Señor no se tarda en cumplir Su promesa, según algunos entienden la tardanza, sino que es paciente para con ustedes, no queriendo que nadie perezca, arrepentimiento".
2 Pedro 3:9

El Señor jamás nos defraudará, tengamos paciencia de ése tiempo que Dios nos otorga por misericordioso, porque
Él es paciente y de bemos imitarle, pero jamás porner en duda su ofrecimiento.

"...el tiempo señalado se apresura hacia el fin y no defraudará. Aunque tarde, espérala; porque ciertamente vendrá, no tardará".
Habacuc 2:3

En pocas palabras, vendrá, sólo que nosotros no sabemos cuándo, pero ciertamente se cumplirá y vendrá al final, cuando se termine su Misericordia infinita para con nosotros. Entonces vendrá la justicia Divina y el justo castigo o recompensa.

En ves de impacientarnos, busquemos la conversión y si creemos que ya estamos convertidos, nos engañamos: mejoremos, corrijamos, porque nadie puede decir que está perfectamente convertido, o si no, ya estaría fuera de este valle de lágrimas.

Seamos pacientes con los demás, busquemos la conversión de muchos y que la gente se entregue a la oración, enseñémosle a orar, que orar es parte de la conversión perfecta y hagámoslo pacientemente, mientras tengamos la maravilla de la misericordia de Dios!

Busquemos la perfección, la paz, acerquémonos a las bienaventuranzas, seamos santos, como Santo es el Señor y entonces el tiempo de la misericordia dará paso a la justicia Divina y al Reino de los Cielos.

Pido a TODOS LOS SANTOS nos ayuden a tener paciencia, que entendamos cual es la conversión perfecta que necesitamos, para que Dios tenga misericordia con nosotros!


Lic. Mireya Urbina

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